Húngara

26 de junio de 2010 | Letras, Pinceles

“Ha descubierto el espacio abierto, la luz y los ocasos…
En días de negrura se empequeñece y esconde
asustada de sí misma; temerosa de auroras invasoras.
Sabe que ha muerto y nacido (en ese orden)
de nuevo y para siempre aunque le falte una muerte.
El alumbramiento que la puso en este mundo
era sólo preludio…
Este comienzo es el que cuenta:
elegido y aceptado con  los dolores y los cambios…
Ya no le llegan a la que ha nacido  los fríos y las sombras…
Yo vuelo en ella… Ella se cobija en mí…»